En pocos días estaremos ya en el 2010. El comienzo de un nuevo año es siempre un momento que invita a realizar una evaluación acerca de lo sucedido en el que termina, de aquellas cosas que logramos y aquellas otras que nos quedaron pendientes o que tenemos muchos deseos de llevar a cabo. Por tanto, es un momento de cierre y apertura respecto a tus proyectos. Si estás pensando en tus próximos pasos, hoy veremos algunos puntos básicos que es oportuno tener en cuenta para realizar una planificación clara plausible de llevarse a la práctica.
* Busca tu lugar especial y organización
Como punto inicial al disponernos a planificar nuestras próximas actividades, es necesario contar con un espacio físico en el que nos sintamos cómodos y podamos concentrarnos. Es entonces, en esa tranquilidad que logramos sentir ya desde el ambiente en el que nos encontramos, donde podemos ponernos en contacto con nuestros deseos y necesidades. Tomarte unos minutos para relajarte, respirar hondo y luego proceder a escribir una lista o quizás pensamientos que te surjan en ese momento, puede resultarte una buena manera de comenzar. El realizar un registro en papel, conlleva el efecto visual de ser una suerte de confirmación y puesta en orden de nuestras ideas.
Luego de conformar tu lista, no olvides establecer prioridades ubicando en primer lugar tus responsabilidades, aquellas cosas a las que te has comprometido y luego lo demás.
*Aprovecha tu creatividad
No necesitas ser precisamente un artista para reconocer y sacar el mejor partido del potencial creativo que todos tenemos. Cada uno de nosotros posee su propia forma de expresión, la cual podemos explorar, potenciar y desarrollar. Podemos hacer de nuestra vida un acto creativo, aplicando esa capacidad de innovación y adaptación a distintas y nuevas circunstancias.
*Esperanza vs. Obstinación
A través de los medios de comunicación, especialmente de la televisión, suele intentar inculcarse la idea de que para alcanzar las metas que nos proponemos, todo tiene siempre que salirnos bien, pasando por la vida de un éxito a otro. Esta visión sumamente engañosa, no sólo puede generar culpa, estrés y una autoexigencia desmedida, sino que también no permite reconocer todo el aprendizaje y crecimiento que podemos obtener de los errores ni acceder a una visión realista del mundo. Asumir los fracasos es un signo de madurez que posibilita el avance. Denota salud el aceptar que no todos los factores que influyen en las circunstancias están bajo nuestro control y que eso no significa un impedimento para seguir adelante. Vivir con la idea de que todo tiene que suceder exactamente como nos lo imaginamos, no sólo nos dificulta el disfrutar plenamente de lo que ya tenemos, sino también nos deja con la sensación de que nos falta algo.
*Deja de orbitar alrededor de un tema
Muchas personas, cuando tienen en sus vidas una situación o sentimiento que les produce malestar, creen que el camino acertado para encontrar la solución, es no dejar de pensar una y otra vez en el mismo. Están convencidos de que de esa forma llegarán a su entendimiento. Sin embargo, este mecanismo obsesivo lejos de aportar soluciones y comprensión lo que genera es estrés, malestar y confusión. A corto plazo la persona se siente cansada y tan mareada como si le hubieran dado vueltas y vueltas.
En tales circunstancias, aunque pueda llamarte la atención, lo más conveniente es no ponerse a pensar en el tema. Pon tu mente en cualquier otra cosa y si puede ser en algo que te distienda mejor. La respuesta que tanto buscas surgirá cuando menos la esperes. Ello se debe a que la mente necesita cierta tranquilidad básica para funcionar.
* Toma decisiones
Para sentirnos felices y enérgicos para llevar a cabo nuestros planes, es muy importante potenciar la propia capacidad de tomar decisiones. La propia determinación, así como los pequeños y no tan pequeños logros que vamos acumulando en especial tras superar dificultades o situaciones que considerábamos retos, siempre tienen como efectos aumentar la autoestima, el sentimiento de valía y el sentirse competente. Todo lo cual lleva a experimentar mayor seguridad.
Tomar el comienzo de año, como una instancia de reflexión para una pronta puesta en práctica no solo de lo que debes sino también de lo que deseas hacer, es una oportunidad que está en tus manos aprovechar.
Por medio de este blog, nuestra vía de comunicación con ustedes, nuestros muy estimados lectores, tanto Mariana como quien les escribe, les deseamos que la pasen muy bien el próximo 31, ya sea en la tranquila y placentera compañía de ustedes mismos quizás con un buen libro o una película que les guste, o junto a sus seres queridos, esos vínculos verdaderos que todos tenemos y que no necesariamente tienen que coincidir con los que se publicitan por televisión. Y que además, el próximo año los encuentre llenos de salud, esperanza y confianza en sí mismos.
Muchas gracias por esta motivación. Aunque esto me hace reflexionar, acerca de que, deberiamos hacer esto todo el año, y no solo cuando termina y empieza uno nuevo. Somos bastante perezosos a la hora de cuidarnos a nosotros mismos aveces, cuando de lo «que no se ve» se trata. La acción que planteas en esta oportunidad, es sumamente refrescante, renovadora, y da animo a plantearse nuevos desafios. Aprovechemos que comienza el 2010, para darnos el permiso de sentir que podemos ser mejores cada dia.